El estilo de interiorismo moderno tiene su origen a principios de siglo XX. Este estilo se considera uno de los estilos de interiores más puros y de líneas simples. Los diseños de interiores basados en el estilo moderno favorecen las distribuciones de planta de concepto abierto, así como la inclusión de la mayor luz natural posible para conseguir una mayor amplitud de los espacios.
La delimitación de los ambientes se genera mediante la disposición de mobiliario y los tonos protagonistas son los neutros como blancos y beiges, con la aplicación del color como detalle.
El equilibrio entre la funcionalidad y la estética supone el cimiento sobre el que pensamos diseños de estilo moderno para tu vivienda.